Se conoce como almohadillas, cojinetes o huellitas a la piel que está debajo de los dedos de las patas de los perros. 

El paso de los canes recae en los dedos, por eso es importante cuidar que no se lastimen las almohadillas, ya que su función no es solo proteger las articulaciones de los dedos, sino también amortiguar los movimientos y servir como aislante térmico.

Para resistir el roce de las superficie, la piel de las huellitas es bastante gruesa, oscura y dura, la compone una capa superficial muy ancha de queratina. La queratina es la proteína de las uñas y el pelo; por debajo tienen una capa de grasa.

Los cojinetes tienen un gran número de glándulas sudoríparas que los hidrata. Los perros solo tienen este tipo de glándulas en las almohadillas y en la trufa (nariz).

Es muy fácil que los perritos sufran lesiones en sus almohadillas, como cortes por vidrios o metales, espinas que se claven en las huellitas o queden entre el pelo de los dedos. Estas lesiones son muy

dolorosas porque tienen muchas terminaciones nerviosas.  

Cuidados de las almohadillas

En los cachorros los cojinetes son suaves y finos, el ejercicio regular y los paseos ayudan a fortalecerlos, por eso es importante que durante sus paseos se alterne la superficie del terreno, asfalto, pasto, grava, tierra. Evita que tu mascota pase más de 15 minutos en el agua, pues las almohadillas se ablandan y se puede desprender una parte de la superficie de estas y lastimarlo.

Recorta el pelo de entre los dedos con frecuencia para que no se formen nudos ni quede suciedad o espigas que le impidan caminar con normalidad.

Evita sacarlo a pasear cuando el suelo esté muy caliente ya que puede sufrir quemaduras.

Una forma de mantener las almohadillas en buen estado es aplicando, después de limpiarlas, un poco de PAW BALM, TerriomaxÒ, al regreso de sus paseos y por la noche.

PAW BALM, TerriomaxÒ refresca y suaviza la piel de las almohadillas por sus ingredientes hidrantes naturales y veganos.